EL INCIDENTE
(MÉXICO, 2014)
Existen deficiencias innegables en lo que a cine mexicano contemporáneo se refiere. Por más que se intente argumentar que es una industria en crecimiento y que sus producciones hayan aumentado de forma significativa en calidad y cantidad en los años recientes, es evidente que lejos se encuentra nuestra industria de competir con otras industrias nacionales igualmente en crecimiento y más lejos aún de lograr alcanzar el esplendor de la ya lejana y nostálgica Época de Oro. El cine mexicano se divide, por un lado, por las comedias, en algunos casos exitosas comercialmente (cuyas producciones esteleraes han sido las recientes No se aceptan devoluciones de Eugenio Derbez en 2013, o Nosotros los Nobles de Gary Alazraki en el mismo año), pero siempre carentes de contenido y propuesta, a excepción quizás de las sátiras políticas que han logrado cierto grado de trascendencia y reconocimiento a nivel internacional; por otro lado se tienen los múltiples dramas sociales donde se reflejan con mayor o menor grado de eficiencia los diversos conflictos sociales que nos ofrece nuestra colorida pero fatídica sociedad y, por último, un cine de terror que horroriza no por la calidad de sus historias (muchas veces remakes) o sus valores de producción, sino por sus terribles estándares de calidad en todos los ámbitos que son posibles de evaluar. Como fuera de estas categorías no existen muchos filmes que incursionen en otros géneros más allá de los típicos ya enumerados, El Incidente llama la atención desde el punto en que es presentado al espectador como un thriller de ciencia ficción.
El Incidente es el primer largometraje de un joven director mexicano (apenas 29 años) llamado Isaac Ezban, y se siente difícil que pudiera haber tenido mejor debut. Con un guión extraordinario (una de sus cartas más fuertes y reconocidas, habiendo ganado diversas distinciones en festivales internacionales por todo el mundo, entre ellos el premio a mejor guión en el International Film Festival de Guanajuato) y un elenco muy fuerte, conformado por los actores Raúl Méndez, Humberto Busto, Nailea Norvind, Leonel Tinajero (estos dos últimos, con interpretaciones soberbias), entre otros varios actores, Isaac Ezban saca a flote, con un presupuesto limitado, esta gran odisea de ciencia ficción.
Es complicado hablar de los grandes prodigios argumentales de la película sin entrar en detalles que desembocarían en spoilers, pero debe decirse que la historia es, en todo momento, muy interesante y sólida, aunque exige atención constante del espectador si es que éste quiere comprender los detalles entre los recovecos y sinuosidades de, eso sí, una historia algo complicada. La película presenta, en primer lugar, la historia de dos delincuentes que tratan de escapar de un detective a través de las escaleras de un edificio cuando caen en la cuenta de que éstas parecen no tener fin. Por otro lado, y con otros personajes (cuya relación con los primeros personajes se presenta tan sólo con sutiles pistas que aparecerán sólo al ojo atento), El Incidente cuenta la historia de una familia de cuatro integrantes que, en mitad de un viaje de vacaciones, se ven "encerrados" en una carretera infinita en la que, sin importar si se avanza para adelante o para atrás, se termina llegando a donde mismo.
Si bien ésta es, a grandes rasgos, la premisa que ofrece el filme y todo lo que el mismo da en la primera media hora, es a partir de que se han presentado las dos historias y éstas comienzan a desarrollarse que empieza a desarrollarse el verdadero potencial de la película. Las evidentes carencias de presupuesto que la película tenía, se vieron magistralmente superadas con los inteligentes manejos de cámara y la calidad general de la cinematografía: situaciones tensas en que la cámara se mantiene estática mientras que los actores se mueven con nerviosismo y dinamismo por la pantalla, ángulos vitosos y poco cotidianos, dignos del cine de horror psicólógico, y tomas amplicas con movimientos sutiles de cámara en las escenas que tratan de demostrar apertura y un ápice de libertad, son tan sólo algunos ejemplos de los ingeniosos trucos de cámara presentes durante toda la película y que la convierten en una experiencia visual entretenida de principio a fin.
La película no es, sin embargo, perfecta; y sus deficiencias, como la carencia de presupuesto y un par de diálogos que resultan hasta cierto punto difíciles de digerir, son presentes y difícil de pasar por alto. En algunos momentos las actuaciones se sienten demasiado enérgicas y saturadas, mas no creo que sea tanto una deficiencia del notable elenco como de la película que falla en hacer entender a la audiencia los antecedentes de los personajes o las circunstancias que los llevaron hasta un punto particular de la película (existe un manejo de tiempos particularmente raro inherente a la trama de la cinta). El score musical se conforma mayormente de piezas de música clásica que parecieran no tener mucha relación con los eventos que se desarrollan en la película, aunque algunos podrían interpretar que sí hila las historias representadas y les dota además de gran calidad argumental.
De cualquier manera, El Incidente es una película notable. No sólo como cine mexicano, en donde resalta como una pieza dorada entre tanta opacidad, sino que se destaca como cine de ciencia ficción y se convierte en una obra de cine de culto instantánea. ¿No lo creen? Véanla y júzguenlo por ustedes mismos, no se arrepentirán.
Calificación: 4.5/5 respecto a la siguiente escala:
1: Terrible
2: Mala
3: Buena
4: Excelente
5: Legendaria
2: Mala
3: Buena
4: Excelente
5: Legendaria
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