Reseña: The Martian (Misión Rescate)

THE MARTIAN

(MISIÓN RESCATE)

(USA, 2015)

A lo largo de una prolífica carrera, Ridley Scott se ha consolidado como uno de los más grandes directores dentro de la industria cinematográfica y en una auténtica leyenda viviente. Películas como Alien en 1979 y Blade Runner en 1982 representan un inicio más que brillante para el director (no son pocos los que incluso consideran Blade Runner como una de las mejores películas no sólo de ciencia ficción, sino de la historia). Años más tarde, Gladiator en 2000 y Black Hawk Dawn en 2001, aunque en mi opinión sobrevaloradas, le valieron el reconocimiento de la Academia y el éxito masivo internacional. Pero entre tanto éxito, Ridley Scott también ha demostrado ser inconsistente con producciones tan desafortunadas como Robin Hood en 2010 o la reciente y lamentable Exodus: Gods and Kings del año pasado (2014) que han ensombrecido un poco su brillante carrera. Es por esa inconsistencia en sus películas que no estaba seguro de qué esperar con The Martian, la más reciente película del director inglés.  

The Martian generó grandes expectativas debido al hecho de que marca el regreso de Scott al género de ciencia ficción (al que sin duda pertenecen sus mejores obras), a que reuniera un elenco muy interesante encabezado por Matt Damon pero contando también con otros actores interesantes como Jessica Chastain, Kate Mara o Michael Peña, y a que la NASA estuviera siguiendo de cerca la producción y participando de cierta manera en la factibilidad de los sucesos que en la película acontecen; estos hechos proporcionaban un valor agregado a la producción y la convirtieron sin duda en uno de los estrenos más esperados del año.



Hay muchas cosas buenas en The Martian. Basada en la novela de 2011 del mismo nombre escrita por el norteamericano Andy Weir, The Martian cuenta la historia de un astronauta botánico (Matt Damon) que, en medio de una misión de exploración y recabado de datos para su análisis científico se queda atrapado en Marte, por completo solo y sin recursos suficientes para sobrevivir por mucho tiempo. El primer punto positivo de la película es, pues, su historia, pues resulta interesante y fresca debido al contexto espacial en que se desenvuelve. Otro aspecto a resaltar es la excelente actuación de Matt Damon, quien hace con su personaje tanto como se pudo haber hecho considerando el incompleto desarrollo de personajes que en el filme se realiza. Y es que es un hecho que las interacciones entre los personajes “principales” de la cinta son prácticamente nulas (más aún considerando que el protagonista está varado y sin posibilidad de comunicación eficiente con sus compañeros) lo que resulta en un desperdicio de talento tras habrá agrupado a un elenco tan interesante.

The Martian es un himno a la ciencia. La influencia de la NASA en la película es notable en cada segundo así como el deseo de demostrar a la audiencia las grandes maravillas científicas que pueden ayudar a resolver toda clase de problemas. El filme se toma el tiempo para dejar en claro que la ciencia, sin tener que ser necesariamente sofisticada, debe ser eficiente. La ciencia se vuelve entonces en el tema principal de la película, y no es que esto sea malo, sin embargo considero que es también su principal debilidad, pues se priva de la oportunidad de desarrollar las emociones tan interesantes por las que sin duda atravesarían los peronajes de la cinta y las personas cercanas a ellos (familiares, amigos, colegas, etc.), consiguiendo con ello que ningún personaje se profunidice y parezca que se han utilizado tan sólo de comparsa.

Los valores de producción son, como Ridley Scott nos tiene acostumbrados, impecables. La fotografía es excelsa, resulta un deleite visual apreciar los áridos paisajes de un Marte por demás hostil, además de algunas breves pero impresionantes tomas espaciales en las que se nota el apoyo por parte de la NASA. La música es en general buena, muy acorde a la temática espacial de la película, aunquye se integran en el score musical algunos temas de música disco que parecen puestos ahí de manera forzada, con la intención de dar herramientas para jutificar un lazo emotivo entre los personajes pues, sin recurrir a esta clase de trucos, sería por completo inexistente. La edición es excelente, y el arte conceptual detrás de la película está bien trabajado aunque lejos está del arte de otras cintas que se prestan más para ello, como la original Alien o incluso la reciente Prometheus.

No quisiera demeritar los grandes logros de The Martian. Es sin duda una gran película y uno de los estrenos más interesantes en lo que llevamos del año, aunque un guión inexpresivo, y un pobre desarrollo de personajes y sus interacciones, la alejan de la genialidad a la que Ridley Scott nos había acostumbrado en otras de sus grandes producciones.

Calificación: 3.5/5 respecto a la siguiente escala:

1: Terrible
2: Mala
3: Buena
4: Excelente
5: Legendaria

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